Cubanos en la red.


Desde hace algunas semanas, desatada la tensa situación de un grupo de cubanos en la frontera de Puerto Rico y Nicaragua, cientos de familias en la mayor de las Antillas viven momentos de zozobra.

Una situación enredada con declaraciones encontradas de algunos gobiernos, medidas restrictivas a los viajes hacia Ecuador y más de una polémica por la situación de los más de 3000 cubanos que hoy esperan una salida en medio de centro América.

Sin dudas la empresa de alcanzar el sueño americano, amparado en la Ley de ajuste Cubano (única de su tipo para emigrantes del mundo en aquel país) trae consigo más que un riesgo económico para los que sin pensarlo vendieron sus pertenencias, algunos hasta los hogares, para costear la peligrosa travesía.

Aunque ya se ha escrito mucho sobre el tema, vale volver sobre algunos apuntes que considero necesarios subrayar. Considero que la incertidumbre ahora es cual será la solución definitiva a los varados en frontera? ¿Cómo continuarán camino o enfrentarán el regreso a casa?

Pude vivir de cerca la experiencia de una familia mayaricera que la pasó rezando y encendiendo velas durante el camino del hijo guiado por “coyotes y zorros”.  Pude sentir su angustia cuando escuchaban hablar de los grupos narcotraficante que operan en centro América y que controlan también el negocio de la trata de personas en ese corredor macabro donde mueren miles  y desaparecen cientos todos los años.


Una nota leída hace algunos días en la red me dejó meditando acerca de la influencia de los Estados Unidos con lo que ahora ocurre. Queda claro que a pesar de la ley de ajuste cubano aquel país no desea recibir una avalancha de emigrantes, que vendría a agudizar el problema con los cerca de 15 millones de indocumentados disgregados en la gran nación.

Dicen algunos en las redes sociales que ciertamente fuentes de inteligencia de los Estados Unidos ofreció informaciones a su contraparte en Costa Rica para capturar a un grupo que se dedicaba al trafico de personas. Desarticular ese grupo de algo más de 10 personas trajo consigo la presente crisis. Aunque el tema no es tan sencillo ya que esos grupos operan bajo el amparo de fuertes mafias narcotraficantes.

Lea en la red: La política migratoria cubana y su contexto.

Algunos pensadores y políticos de buena fe, plantean que la mejor salida es que el país con los llamados varados cubanos y el país de destino, busquen los acuerdos necesarios y trasladen a esas personas con total seguridad. En ello no se puede ahora mirar costos, aquellos cubanos están decididos a viajar y una deportación hacia la Isla sería caldo de cultivo para agravar la situación.

Kattia Rodríguez, directora de Migración en Costa Rica, dijo a un medio de prensa: ¿Garantías? ¿Garantías de que no sigan bajo la influencia de esta gente? No podemos dar garantías. Imagínese que dentro de la logística que tanto en Costa Rica como en todos los demás países que han estado están porque hay gente en toda la ruta, Ecuador, Colombia, un medio guatemalteco reportaba cubanos en Honduras. Ellos siguen siendo monitoreados, ellos pagaron por un servicio, y comillas, dicho de la forma más dolorosa porque así es como los están utilizando, "la mercancía no se puede perder", entonces justamente eso es lo que ya llegó, el momento en que la región diga: "O el paso es legal y regular, no podemos seguir incrementando y fortaleciendo estas redes criminales y seguir haciendo la vista a un lado".

Eso denota lo complejo del problema migratorio aupado por la Ley de ajuste cubano y estimulado además por algunas posibilidades de viajes que hasta este primero de diciembre concedió Ecuador. Mientras todo ocurre, los cubanos atrapados en la red desesperan y junto a ellos sus familiares en casa.














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