Encuentro austero a la vista.

El encuentro de agrupaciones soneras Mayarí 2016 será austero. La frase se ha reiterado en varias ocasiones en la comisión organizadora del evento y no escapa a la reflexión de muchos.

Austero significa sobrio, justo, parco….señala que no habrá excesos y que los organizadores deben medir las consecuencias económicas de cada acto.

En medio de las siempre complejas situaciones por las que atraviesa la economía, sectores como el de la cultura tienen el encargo de solventar financieramente sus principales eventos, buscando sobre todo las garantías del pago a las agrupaciones musicales.

Pero este dinero no sale de las cuentas del referido sector, aunque fluya a través de éste. El fondo para los gatos del encuentro sonero se sostiene con los aportes de entidades como el comercio, que graba impuestos especiales a productos como la cerveza a granel. También contribuyen los permisos a cuenta-propistas y cobro por entrada al área.

Una cuenta especial recibe esta inyección económica, que en la mayoría de las ocasiones no alcanza para sufragar los gastos del festejo sonero.

Según cálculos del sectorial de cultura, para este encuentro solo en talento artístico están previstos gastos superiores a los 295 mil pesos. Dinero que va fundamentalmente al pago de las agrupaciones, que en la mayoría de los casos cobran más de 15 mil pesos por actuación. Algunas piden hasta 30 mil, por actuación.


Comprender este tema nos ayuda a elevar la conciencia sobre lo necesario que representa entonces el cobro para entrar al área musical o exigir para que algunos No escapen a los medidas de seguridad establecidas y pasen una y otra vez sin abonar lo estipulado.

En este año el municipio invertirá más de cuatrocientos mil pesos en el mayor evento sonero de la provincia de Holguín, pero esa cifra constituye solo poco más de la mitad de lo que se empleaba anualmente en  periodos anteriores.

Urge entonces ser más eficientes en los espacios culturales propuestos, exigir mayor calidad de las agrupaciones presentadas y buscar alternativas para sostener eventos claves, con bajo costo financiero pero de alto valor cultural, como el encuentro teórico.

En los tiempos que corren, no debe haber dicotomía entre ingresos y gastos económicos. Es ahí donde se pone a prueba la previsión y control.

Será un evento austero, pero justo. Con opciones claras que ayudan a sostener la identidad musical del cubano. Eso esperamos.

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