Mayarí prospero.


Es sin dudas Mayarí un municipio rico y los especialistas que hoy invierten aquí, sobre todo en la esfera agrícola, aseguran que será el más prospero de la provincia de Holguín durante el 2019.

Este desarrollo está vinculado a un programa que se aplica en el territorio desde finales de 2012 y que tiene, en la creación de una base productiva, su fuerza mayor.

Pero la razón de la afirmación que da titulo a este pots está en las aguas que bañan a este sitio de la geografía oriental de Cuba.

Mayarí es el primer eslabón del trasvase este-oeste, magistral obra hidráulica que permitirá llevar agua a través de túneles y canales hasta el centro del país.

Para poner ejemplos concretos, este municipio cuenta con dos grandes embalses: la presa Mayarí (430 Millones de metros cúbico) y la presa Nipe (113 millones de  metros cúbico). Se unen a ellas varios pequeños reservorios de agua, que imprimen una verdadera fortaleza hídrica a la localidad.


Todos sabemos que el agua es poder en los tiempos que corren. Las nuevas guerras buscan posesión de este recurso en el planeta. (Mayarí cuenta con más de cien ríos y arroyos, además de una fuente subterránea con aguas muy puras en las zonas del Pilón)

A lo anterior añadimos una amplia red de canales y emplazamientos de sistemas de riego artificial (13 de gran escala hasta hoy) expandidos en más de once mil hectáreas. La mayoría funcionando gracias a la gravedad, lo que ahorra significativos pesos a la nación.

Hablamos de garantías para sostener la alimentación del pueblo y contribuir con recursos a varios municipios de la provincia de Holguín.

A lo anterior sumamos la producción de energía. Por un lado, la termoeléctrica Lidio Ramón Pérez, ubicada en la zona de Felton y la de mayor capacidad de generación del país (500 MW) y por el otro un complejo sistema de pequeños grupos generadores con capacidad superior a los 70 MW.

Ahora el futuro apunta a más energía eléctrica, pero esta vez energía limpia. Ya están a tope dos pequeñas hidroeléctricas y se estudia la instalación de un parque foto-voltaico, todo ello hará que la población mayaricera sostenga sus servicios sin las preocupaciones que genera la crisis petrolera mundial.

En medio de diversas cargas económicas, es sin dudas Mayarí un municipio prospero….esto es solo un ejemplo.


1 comentarios:

Anónimo dijo...

Mayarí siempre fue un municipio con recursos. Desde los primeros tiempos de la conquista de sus territorios, hasta el tabaco lo sembraron de forma que aprovechaban las crecidas del río para, en el limo fertilizante de sus riveras, cultivar una hoja grande, olorosa y resistente que se exportaba por vía fluvial al mundo.
No es todo. Grandiosos árboles madereros; pinos en abundancia; animales para la caza; una bahía que «cabrían todas las naos del mundo», abundosa en peces; la caña de azúcar solo había que sembrarla una vez; «tierras feraces»; minerales abundantes; cafetales; miel de abejas; clima ideal. En fin, lo mejor de todo, en todos los tiempos, una red de arroyuelos y ríos que mojaban todos sus suelos... ¿Qué pasó en Mayarí? ¿Por qué, con esta y otras ventajas sobre cualquier pueblo de Cuba, no sobresalió? ¿Existe una maldición? ¿Seremos capaces de explotar alguna vez esos recursos regalados por natura y desarrollar el municipio?
Nunca, nadie, respondió estas preguntas. Ahora, supongo, se dieron cuenta que es un territorio bendecido por Dios. En ninguna parte del mundo revienta una semilla como allí, en mi pueblo, aunque la tires en la tierra seca, en un resquicio de la acera, en el patio sin atención, en el monte cerrado, nace una planta. Jamás verás en otras tierras, fructificar árboles frutales que nacieron gracias a que un caminante dejó caer una semilla de mango, de papaya, de guayaba. Nuestra Cuba, y en especial el municipio Mayarí, es único... ¡carajo! Y perdonen la frase dura que es de alegría y tristeza, a la vez; de impotencia y fuerza, a la vez; de ruego y exigencia, a la vez.
Mayarí fue descrito por el Conde de Mopox y Jaruco... ¡Hay que ver lo que dijo! Los primeros ojos que la vieron quedaron sorprendidos por su riqueza y futuro grandioso: salida al mar, montañas con madera para los barcos, resguardo naval, ríos que la regaban, tierras fertilísimas, etcéterassssssss. ¡De todo! ¿Qué pasó entonces?
Hoy veo estos titulares y digo ¡Al fin! Quizá por una buena razón se mantuvo virgen mi tierra, para entregarse a Cuba, para no disfrutar sola, con el egoísmo de otras ciudades; para que, en la noche de bodas, que ha de ser pronto, la unión de las palmas de Martí con el hombre interesado en preñarlas para que dé frutos, Mayarí sobresalga entre los pueblos de Cuba, ese Vallecito Florido de la canción de Meléndez, el sabor inconfundible del son de los Taínos, los colores de las pinturas de Bref, las plumillas limpias de Barzaga, las notas lejanas de un pianista internacional y mayaricero, los Güijes de Emerio Medina, la voz de los que ya no están, de los que aún están, de los que se fueron y están. He dicho. El último apaga la luz.

Publicar un comentario

Twitter Delicious Facebook Digg Favorites More