jueves, febrero 18, 2016
emimundo Cuba
La noticia de la visita del presidente de los estados Unidos a Cuba, programada para los días 21 y 22 de marzo, ocupó principales titulares de la prensa internacional y causó admiraciones dentro del país, pesé a los movimientos de acercamiento que se han sucedido desde el 17 D.
Algunos aseguran que el bloqueo a la mayor de las Antillas tiene los días contados, no obstante el tropiezo que representa el debate en el congreso del norte y las intensas campañas que vendrán a favor y en contra.
Algunos aspirantes a la casa blanca, de origen cubano por cierto, dicen que es un error que el presidente Obama venga a Cuba y critican la posición adoptada por su gobierno para acercarse a este país.
Me sumo a los primeros, esos que aseguran que los días del Bloqueo comienzan a flaquear. Una muestra es que se siguen creando grupos de apoyo para su derogación definitiva, sobre la base de No sostener una política sin éxito.
Entre cubanos seguimos de cerca el tema y creo que un paso sólido debe estar a la vista. Considero que a Obama le falta un golpe de gracia y tiene poderes ejecutivos para ello.
El asunto de poder negociar con el dólar americano y realizar transacciones en bancos internacionales con esa moneda, debe estar en la agenda del presidente en el contexto de su visita a la Isla.
Todo esto que le digo son puras especulaciones políticas, fundadas en mis observaciones del tema Obama-Cuba desde que comenzaron a descongelarse las relaciones entre los dos países.
A lo anterior se pueden sumar otros asuntos o vasos comunicantes. Se espera que de la visita del ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera de Cuba Rodrigo Malmierca Díaz a la Cámara de comercio de EEUU salgan nuevas propuestas, aunque él aclaró que Cuba no avanzará hacia la dependencia económica de otro país, como ocurrió hasta el 59 o 90 del siglo XX.
Mientras comienzan a correr los días y se inician los preparativos para la llegada de Barack Obama, se agudizan las especulaciones de todo tipo vinculadas al tema y sobre todo a sí sostendrá lo sugerido en uno de sus discursos, el hecho de poder reunirse con la llamada disidencia interna.
Cierro reiterando que en el paquete de medidas barajadas para normalizar las relaciones y que incluye un tema tan complejo como la Base Naval de Guantánamo (según afirman en EEUU eso puede dañar su seguridad nacional) y la eliminación definitiva del Bloqueo, el tópico más cercano es que el presidente permita el uso del dólar para las transacciones internacionales.
Eso abriría inmensas posibilidades económicas y eliminaría las constantes trabas financieras ( otro paso sería que Cuba No tenga que pagar por adelantado o al momento las compras de alimentos).
Pero como diría el Pidio Valdez, uno de los personajes más pintorescos del dibujo animado cubano, Eso habría que verlo compay.
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